¿Cómo aprender a estudiar rápido y mejor? 10 consejos que pueden ayudarte

Partiendo de la base de que no existe un método para todos, debemos preguntarnos qué cosas podemos hacer para mejorar en el estudio, y conseguir una serie de procesos que sean eficaces para nosotros o nuestros hijos.

Así pues, vamos a dar una serie de consejos y pautas que pueden ser muy provechosos para alguien que ha empezado a estudiar, o para una persona que tiene hijos en edad escolar.

 

1. Leer, leer y releer

Pues bien, existen numerosos estudios que demuestran que un estudio de calidad se basa en primer lugar en una buena capacidad lectora.

Cuánto más lecturas se hagan mayor facilidad para mejorar la redacción se tendrá y sobre todo, mayor retentiva se tendrá que de hecho, será la mejor arma que tendremos en nuestras pruebas o exámenes.

Una redacción clara e intuitiva será esencial para poder realizar un estudio rápido y sobre todo, eficaz.

 

2. Escribir correctamente

Tener claras las normas de ortografía es sinónimo de haber estudiado mucho, pues a la larga, las múltiples normas que regulan nuestra gramática se aprenden a base de repetición.

 

3. Subrayado de calidad

Los fabricantes de subrayadores deberían dar palmas con nuestros estudiantes, ya que, muchos libros parecen formar parte de un arsenal nuclear de lo que brillan. Un subrayado bueno es parte importante de un estudio eficiente.

4. Resúmenes

Cómo resumir es un arte. Aprender a sintetizar ideas dispersas y variadas, darle forma y que no se quede nada en el candelero es algo muy valioso pues nos ahorra mucho tiempo de estudio. Tener claro cuáles son las ideas principales y secundarias hará mejorar mucho nuestras notas.

 

5. Esquemas

Los esquemas son parte importante para repasar, pero deberían tener un papel secundario en el estudio. Esto es así debido a que, en muchas ocasiones nos encontramos con esquemas que tienen demasiada información, o al revés, demasiado pelados de contenido.

 

6. Preguntarse y contextualizar

Una herramienta muy útil es crear preguntas sobre el contenido y autocontestarnos. Esto crea una relación muy estrecha entre el texto y el estudiante, pues su interiorización es parte indispensable del estudio.

 

7. La zona de estudio

La zona donde estudies debe ser adecuada. Nada del salón de casa con los papeles de un lado para otro. Que tu cerebro sepa cuando se tiene que poner en modo “on” con el estudio es trascendental. De lo contrario nos perderemos parte de la concentración con ruidos o situaciones rocambolescas.

8. Un vídeo, un tesoro

Ver vídeos de las materias que estamos abordando serán de una gran ayuda para el estudio porque captaremos mejor las ideas. Pero mejor es: ¡¡hacerlos uno mismo!!

Atrévete a grabarte, no hace falta subirlo, pero escucharte te ahorrará más de un disgusto delante de terceros o al transmitirlo al papel.

 

9. Pruebas y más pruebas

Hazte exámenes sin parar. Crea tú tus propias preguntas de examen y hazlo, sin miedo, sin riesgo. Intenta transmitir lo mejor que puedas lo que has estudiado.

 

10. Horario y organización

Hay tiempo para todo. Es algo que todo el mundo puede comprobar si se organiza correctamente, ahora bien, nunca dejes el estudio para el final del día. Tu cuerpo estará más cansado y tu rendimiento será inferior comparándolo con a primera hora.

 

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